Recuerdo como si fuera ayer

Recuerdo como si fuera ayer el primer día que fuiste a mi oficina a platicar conmigo para trabajar desarrollando Aplicaciones móviles para mi Empresa.

Te describo como un jovencito lleno de ambiciones, sediento y hambriento por conocer nuevas herramientas para poder resolver problemas cotidianos de manera digital. Es difícil encontrar a jóvenes con tus mismas aptitudes, con las mismas ganas de superación y con objetivos bien claros como los tienes tú.

Reconozco que me hiciste recordar mis tiempos de jóven y admito que nuestras vidas son muy parecidas en la búsqueda de poder progresar y encontrar más maneras de poder vivir mejor. Y algo que te caracteriza es la sana actitud de poder ayudar a tu prójimo de diferentes maneras. Platicando, escuchando, obsequiando, ayudando, aconsejando o simplemente con una grata sonrisa y compañía.

Algo muy importante y grande en ti, es tu cercanía con Dios, tu respeto y sabiduría para poder compartir con tus projimos qué también creen y tienen Fé. Considero que has pasado también por situaciones muy difíciles y tristes qué cualquier otra persona se hubiese derrumbado o refugiado en algún vicio que lo llevara a perderlo todo. Hemos compartido momentos muy bonitos en nuestras vidas, coincidimos en muchas ideas y pensamientos positivos de la vida que hemos tenido a lo largo del tiempo que nos conocemos. Siempre he creído que para nosotros fue más importante la relación moral qué la laboral, la cual hizo crecer nuestra amistad.

Creo que tienes todo lo más importante para salir adelante y poder lograr todos tus objetivos y metas fijadas en tu mente. Eres un joven valiente y digno de confianza. Eres un buen amigo, hermano, hijo y no tengo ni la menor duda que serás un gran Padre.

Con todo mi respeto, cariño y admiración para ti Danny.

Atte. José Luis Quiroz